Nuestros lectores no deben caer en el error—muy generalizado, por otra parte— de que les bastará dar una leída a los métodos de ataque y defensa que daremos más adelante para estar plenamente capacitados para hacer frente a cualquier situación, o que una vez que haya finalizado la lectura de este manual podrá aplicar con éxito cualquiera de las presas o tomas que aquí se describirán. El camino a recorrer para estar en condiciones de utilizar con provecho la técnica del Jiu-Jitsu no es excesivamente arduo ni imposible; pero hay que recorrer ese camino. El mismo consiste en un entrenamiento metódico y continuado, que ha de cumplir la finalidad de producir el desarrollo muscular, aumentar la resistencia, endurecer diversas partes del cuerpo y adquirir un especial sentido del equilibrio así come rapidez y agilidad. Todos los ejercicios conductores a los fines mencionados son úitiles para formar el futuro adepto del Jiu.Jitsu, y hay que combinarlos con adecuados ejercicios respiratorios para fortalecer los pulmones y el corazón.
De lo expuesto se refiere que el entrenamiento no es cosa de un par de semanas ni que puede tomarse como un asunto para los ratos perdidos; por ello hemos destacado al principio que debe ser un entrenamiento metódico y continuado.
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